El proyecto de ley 163 que reforma la Caja de Seguro Social (CSS), aprobado recientemente por la Asamblea Nacional, establece un mecanismo para que, en un plazo de seis años, una mesa técnica evalúe la necesidad de ajustes en la edad de jubilación.
Para la Cámara de Comercio e Industrias de Panamá (Cciap) esta medida busca evitar que el debate sobre el futuro de la CSS, sea un “rehén de intereses políticos”, al colocar la toma de decisiones en manos de expertos.
Sin embargo, aseguran que hubiesen preferido que se tomaran decisiones más definitivas desde ahora, consideran que esta disposición permitirá que, llegado el momento, se prioricen las recomendaciones técnicas y no se eviten decisiones necesarias por cálculos políticos.
En su columna semanal, destacan que la CSS “era la bomba de tiempo más apremiante que el país debía resolver” y calificaron como “valiente” la decisión del Órgano Ejecutivo de presentar dicho proyecto.
#CámaraOpina Ahora, corresponde a la administración de la CSS, tan pronto sea sancionada la ley, delinear los próximos pasos y entrar en ejecución. Es fundamental demostrar eficiencia en la atención de salud, citas médicas y abastecimiento de medicamentos.https://t.co/8dHLhcdpdC
— Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura (@CCIYAP) March 16, 2025
“Los gobiernos pasaban, los problemas se agravaban y la clase política, con cobardía, optaba por ‘patear la pelota’, evitando tomar decisiones que, aunque necesarias, implicaban un costo político”, reza el escrito, asegurando que, aunque el proyecto aprobado por la Asamblea Nacional no es perfecto, “representa un avance que permitirá seguir construyendo soluciones”.
Además, envían un mensaje a los diputados: “Aquellos que supieron hacer patria, entendiendo que su responsabilidad no es solo con el presente, sino con las generaciones futuras. A ellos les extendemos nuestro reconocimiento, porque decidieron pensar más allá de las próximas elecciones y votar por lo que el país necesita”.
Sin embargo, señalaron que el comportamiento de algunos diputados recurría a la politiquería. “Los problemas de la CSS no desaparecen ignorándolos, y su negativa a actuar solo agrava la crisis que, tarde o temprano, requerirá soluciones aún más drásticas”.
En cuanto a las huelgas anunciadas por algunos sectores, afirmaron que no encuentran justificación para las mismas y piden evitar las paralizaciones por “intereses particulares, estériles y dañinas”. “Los principales reclamos de los sindicatos —no privatización, no aumento inmediato en la edad de jubilación y ajuste en la cuota patronal— fueron atendidos en el Proyecto de Ley aprobado”.
Por último, instaron a la administración de la CSS que, tan pronto sea sancionado el proyecto, demuestren su eficiencia en la atención de salud, citas médicas y abastecimiento de medicamentos.
