La venta de los puertos que controla el conglomerado CK Hutchison —entre ellos el de Balboa y Cristóbal, ubicados cerca del Canal de Panamá— habría entrado en un punto muerto debido a nuevas exigencias de China para aprobar la transacción, según reseñó este martes The Wall Street Journal (WSJ).
De acuerdo con el medio estadounidense, Pekín estaría presionando para que la naviera estatal china Cosco obtenga una participación mayoritaria en el acuerdo liderado por BlackRock y Mediterranean Shipping Company (MSC), que contempla la compra de más de 40 puertos alrededor del mundo por unos 22,800 millones de dólares.
La operación fue anunciada en marzo, luego de que el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, manifestara preocupaciones de seguridad sobre la presunta presencia china en las infraestructuras estratégicas vinculadas al Canal de Panamá.
Aunque las autoridades del Canal han reiterado que no hay control de China sobre la ruta, la venta de las operaciones portuarias de CK Hutchison, forma parte de la estrategia estadounidense para que ninguna influencia del país asiático esté al menos cerca de la vía interoceánica.
WSJ señala que, aunque BlackRock y MSC habrían estado dispuestos a considerar la entrada de la naviera china Cosco como socio en igualdad de condiciones, la exigencia de control mayoritario y derechos de veto en la gestión de los puertos habría sido considerada inaceptable por los compradores y también por la Casa Blanca.
“El Presidente ha dejado claro que el control chino del Canal de Panamá es inaceptable y pone en riesgo la seguridad nacional y económica de Estados Unidos”, citó el diario estadounidense, en referencia a declaraciones de un funcionario de la Casa Blanca.
Según la reseña del WSJ, fuentes cercanas a las negociaciones aseguran que el acuerdo se encuentra actualmente en un impasse difícil de destrabar, mientras China buscaría utilizar el control de los puertos como una ficha de negociación dentro de las conversaciones más amplias con Estados Unidos sobre comercio y aranceles.
Demandas pendientes
Mientras tanto, CK Hutchison continúa operando los puertos de Balboa y Cristóbal, a través de Panamá Ports Company (PPC), empresa que enfrenta dos demandas en la Corte Suprema de Justicia, interpuestas por la Contraloría General de la República de Panamá.
Justo el pasado lunes 15 de diciembre, el contralor general, Anel Flores, reiteró en entrevista en TVN Noticias, que el contrato de concesión de los puertos de Balboa y Cristóbal no beneficiaba al país y eran ‘leoninos’.
Flores señaló que el proceso se encuentra actualmente en el ámbito judicial, luego de que la Contraloría presentara acciones de nulidad e inconstitucionalidad, y precisó que cualquier avance adicional dependerá de las resoluciones que emitan las autoridades correspondientes.

Precisó que la auditoría a la concesión que se concedió para operar los puertos de Balboa y Cristóbal a PPC, no tiene nada que ver con el origen de la compañía CK Hutchison de Hong Kong, sino con el análisis de que fue un contralo que no beneficia al país.
"No importa de dónde sea la empresa; ese contrato no le sirve a Panamá (...) Ha sido un contrato leonino y lesivo para los intereses nacionales”.
La Contraloría ha reiterado que la concesión otorgada a PPC ha significado pérdidas para el Estado por al menos 1,337 millones de dólares. El informe de auditoría publicado en abril reveló irregularidades y condiciones contractuales desventajosas, lo que motivó la presentación de las demandas mencionadas anteriormente.
El contralor presentó la demanda por inconstitucional el 30 de julio de 2025, junto con otro recurso en el que solicita la nulidad ante la Corte Suprema de Justicia dirigidas al contrato de concesión suscrito entre el Estado y PPC en 1997 durante la administración de Ernesto Pérez Balladares.
El WSJ destaca que más del 40% del tráfico de contenedores de Estados Unidos utiliza el Canal de Panamá para el comercio entre Asia y América, lo que subraya la relevancia estratégica de estas terminales.


