Diana Campos Candanedo dcampos@prensa.com No fue casual que la ciudad de Colón haya sido el escenario de la segunda reunión para discutir los avances del Plan Puebla Panamá (PPP), donde asistieron los representantes de las ocho naciones del sur de México, Centroamérica y Panamá, que formarán parte de esta iniciativa de integración regional y desarrollo humano. Precisamente en Colón se encuentra gran parte de la vocación de Panamá y el mayor aporte que puede brindar el país a esta iniciativa regional: la infraestructura portuaria y logística, como una plataforma para esa integración regional.
Para aprovechar al máximo los beneficios de esta ambiciosa iniciativa, Panamá deberá convertirse en un gran centro multimodal, integrando componentes como el Canal, los puertos, el ferrocarril, los aeropuertos y una red de carreteras que comunique eficientemente a lo interno del país y hacia las fronteras, indicó Reinelda Matta Kelly, experta en derecho marítimo y asesora de la Asociación de Usuarios (AU) de la Zona Libre.
Tenemos que prepararnos para ser un punto de conexión para movilizar ágilmente la mercancía por el istmo centroamericano hacia México y viceversa, recalcó Matta Kelly.
Aunque el Plan Puebla Panamá es un proyecto integral, cuyo fin último es el desarrollo económico y social de la región, en esta primera etapa, el énfasis está en la infraestructura física (red vial, integración eléctrica y telecomunicaciones), que es la base para alcanzar este objetivo, explicó Herbert Taylor, coordinador general del Plan Puebla Panamá.
El PPP y el comercio Si se considera que el aumento del comercio puede traer prosperidad y desarrollo económico a la región, el tema de la integración física de Centroamérica con el Sur de México cobra mayor importancia, porque dicha integración vial, eléctrica y de telecomunicaciones es un elemento decisivo para facilitar el comercio intrarregional y atraer inversiones.
El PPP no es un asunto de tratados comerciales, sino de lograr transformar las deficiencias en la competitividad que actualmente tiene la región, en ventajas competitivas, subrayó Taylor.
El experto reconoció que los países participantes tienen problemas en el transporte de mercancías y personas, dado que existen diferencias grandes en cuanto a los estándares de carreteras en cada país, esquemas de señalización, condiciones de tránsito y reglas de aduanas.
Si no logramos que los camiones con mercancía circulen a una velocidad promedio de entre 80 y 120 kilómetros por hora, estaremos en gran desventaja respecto a otras regiones del mundo, donde la velocidad de traslado de la mercancía es de suma importancia, dijo Taylor.
Respecto al tema aduanero, Taylor reveló que dentro del Plan Puebla Panamá se está estudiando la viabilidad de un proceso de armonización y modernización de los sistemas de aduanas para facilitar el tránsito de mercancías y personas .
En una etapa de consultoría, se encuentra un proyecto para homologar los reglamentos aduaneros de la región, pero esto involucraría una reforma de las leyes de cada uno de los países, lo cual requeriría de un gran consenso político, indicó el comisionado mexicano.
PPP y el ALCA Los críticos de la globalización han protestado abiertamente contra el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y el Plan Puebla Panamá. Pero, ¿qué relación hay entre ambas iniciativas?
Según Taylor, mientras que el ALCA es un tema puramente comercial, que tiene una fecha específica para concretarse (el año 2005), el PPP es el único proyecto multinacional en la región que va más allá de un gran tratado comercial, para adentrarse en temas como desarrollo humano sostenible y competitividad.
El PPP plantea un esquema de vertebración, unión y utilización de nuestras fuerzas para encontrar mejores condiciones y calidad de vida para la población y que de esta manera nuestros países puedan superar sus desventajas comparativas y competir frente a la globalización, sustentó el comisionado mexicano.
Criticar la globalización es como criticar la época lluviosa señaló el coordinador. Lo cierto es que está y uno decide si se esa lluvia lo moja o lo fertiliza.
Uno de los objetivos del PPP es convertir a la región en un polo de atracción de inversiones hacia Europa, el norte y el Sur del continente, precisamente a través de los elementos de infraestructura física y calidad de vida de la población.
