Las autoridades del Ministerio de Salud (Minsa) anunciaron ayer el cierre temporal de las operaciones de Minera Panamá, en cuya área de concesión permanecen cerca de 2,700 trabajadores.
Desde el pasado 19 de marzo, y hasta el día de ayer, se había puesto en ejecución un cerco sanitario en el proyecto Cobre Panamá, ubicado en el distrito de Donoso, Colón. Esto permitía que la empresa siguiera activa, asumiendo las medidas sanitarias que se exigen frente a la pandemia del Covid-19.
Sin embargo, los trabajadores alertaban de los riesgos que implicaba tener a más de 2,000 personas, que aunque estaban divididas en varios equipos, seguían manteniendo convivencia de dormir y comer en grupo.
Esa cantidad de trabajadores activos, hasta ayer, implicaba que la mina operaba con cerca del del 45% de su mano de obra, como parte de los protocolos recomendados por el Minsa ante la pandemia del Covid-19.
“Nos preocupa la cantidad de personas que trabajan, duermen y comen juntas todos los días en la minera”.
Carlos González, vocero del sindicato de trabajadores.
Ahora, el cierre de la actividad minera anunciado por la ministra de Salud, Rosario Turner, supone un enorme proceso de traslado para los trabajadores mineros.
En teoría ninguno podrá salir del recinto, sin cumplir con 14 días de cuarentena, ya sea en un hotel o dentro de la concesión minera.
Después de que se registró el primer caso de coronavirus de un trabajador minero, a mediados del mes pasado, la empresa aisló a unos 500 empleados que ayer cumplieron con los 14 días de confinamiento en hoteles en la provincia de Coclé.
Como parte del cerco sanitario, se definió que todos los trabajadores que salían de la mina debían permanecer 14 días en un hotel para evitar el contacto inmediato con sus comunidades, tuviesen o no síntomas del coronavirus.
La mayoría del grupo de personas que estaba en confinamiento se empezó a ir a sus casas paulatinamente desde ayer, después de haber cumplido con los días de aislamiento sin dar positivos a las pruebas de coronavirus.
Ayer, también entraron otros 126 trabajadores a esta fase de confinamiento.
Las autoridades del Ministerio de Salud confirmaron que hasta el 6 de marzo se habían reportado 10 trabajadores de Minera Panamá con el virus.
A estos contagiados se suma el deceso de uno de los colaboradores por Covid-19 el pasado fin de semana, lo que avivó la solicitud del Sindicato Industrial de Trabajadores y Trabajadoras de la Construcción de Minas y Desarrollo de la Minería (STM), que pidió al Gobierno que se ordenara la suspensión inmediata de las operaciones de Minera Panamá.
El doctor Israel Cedeño, coordinador Nacional de Vigilancia Epidemiológica del Minsa, explicó que la decisión se tomó como parte de una evaluación diaria que se realiza desde el punto de vista sanitario.
Hasta la tarde de ayer, todo indicaba que la mina había establecido los controles de vigilancia, tanto para los trabajadores que entraban, como para los que salían de la planta. Al menos, eso habían expresado las autoridades, no sin antes advertir que si era necesario, se cerraría la planta.
Respecto al caso del deceso del trabajador, Cedeño explicó que se trató de un diagnóstico aislado.
Una persona de 62 años, hipertensa y con diabetes no controlada, que al parecer estaba incubando el virus cuando llegó a su trabajo. Es decir, que no era un contagio que se dio en la mina.
No obstante, la muerte del obrero disparó las alarmas a lo interno del gobierno y el Minsa evaluaba la situación junto a al Ministerio de Comercio y el Ministerio de Trabajo.
Turner dijo que Gobierno ordenó el cierre temporal de Minera Panamá para resguardar la salud de los trabajadores. El domingo 5 de abril, el ministro de Comercio e Industria, Ramón Martínez, aseguró que ningún interés comercial está por encima de la vida humana.

