Tras haberse levantado de la mesa del diálogo por la Caja de Seguro Social (CSS) desde el pasado mes de marzo, el Consejo Nacional de Trabajadores Organizados (Conato) ratificó ayer su salida de lo que será la tribuna desde donde saldrán las reformas al sistema de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).
Conato plantea condiciones en el debate del IVM. “Lo que procede es anunciar oficialmente nuestro retiro de la mesa del diálogo”, dijo Guillermo Puga, dirigente de Conato.
La propuesta de regresar al diálogo fue sometida a votación en la asamblea de delegados de Conato, que se realizó en el Hotel El Panamá; 128 dirigentes votaron para ratificar la salida de las conversaciones y 28 votaron para regresar.
Conato también acordó exigir al Gobierno que convoque una mesa tripartita -trabajadores, empresarios y gobierno- para discutir las reformas a la CSS.
“Una mesa de diálogo por la CSS requiere que esté formada por los representantes legítimos del sector productivo”, agregó Puga, tras criticar la participación de partidos políticos y diputados, entre otros representantes sentados actualmente en la mesa.
El pasado martes, el gremio había indicado al presidente Laurentino Cortizo su interés de formar parte del debate, tras levantarse de la mesa de conversaciones en marzo pasado. Pero antes debían realizar la asamblea de delegados.
Durante la reunión con Cortizo, plantearon “condiciones necesarias” para que el proceso de diálogo tenga éxito, como el restablecimiento del sistema solidario de pensiones; la suspensión temporal del diálogo para el desarrollo del estudio de la situación financiera de la CSS por personal técnico de la Organización Internacional del Trabajo (OIT); el cambio del facilitador Joaquín Villar, para en su lugar designar a “una persona que cuente con la probidad y confianza de las partes”, y, por último, que se mantenga la integralidad y el carácter público de la CSS.



