El índice mensual de actividad económica (Imae) registró en mayo su segundo mes seguido de crecimiento cuando se compara con el mismo mes del año anterior, pero el repunte no fue lo suficientemente fuerte como para cambiar de rojo a negro el dato del acumulado en los cinco primeros meses del año.
En mayo de 2021, la producción aumentó 20.76% respecto a su similar del ejercicio anterior. El repunte se explica principalmente porque en el quinto mes del año pasado buena parte de la economía estaba paralizada y la población confinada en sus hogares, tras haberse detectado en marzo los primeros casos de coronavirus en el país.
Este año, la mayor parte de las actividades está operativa, aunque se mantienen algunas restricciones que siguen obstaculizando el desenvolvimiento económico.
De hecho, el economista Felipe Argote dijo que “un crecimiento del 20%, cuando el año pasado estuvo todo parado, es muy bajo”.
Aunque abril y mayo de 2021 registraron fuertes aumentos respecto a sus similares del año anterior, cuando se observa el conjunto de los cinco meses aún pesa el lastre del primer trimestre. Solamente en enero, la producción cayó 14.63% como consecuencia, entre otras medidas, de la cuarentena obligatoria impuesta por el Gobierno durante las dos primeras semanas del año en las provincias de Panamá y Panamá Oeste.
Así, en los cinco primeros meses de 2021, el Imae acumula una caída de 1.85% respecto al mismo periodo del año anterior.
El economista Raúl Moreira dijo que la tendencia muestra una recuperación, pero aún lenta, y que al mes de mayo el indicador acumulado del Imae ya debería estar en positivo.
Los distintos sectores de la economía muestran un desempeño dispar.
Explotación de minas, pesca, comercio, servicios de salud privada y administración pública tuvieron un desempeño positivo respecto a los cinco meses del año anterior.
Por su parte, hoteles y restaurantes; construcción; industrias manufactureras; intermediación financiera; sector agropecuario; actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler; transporte, almacenamiento y comunicaciones; electricidad y agua, entre otras, tuvieron un desempeño negativo, según la información del Instituto Nacional de Estadística y Censo.
Sobre estos datos, Argote comentó que el desempeño de la construcción es determinante, porque tiene un peso elevado en la composición de la economía y por el efecto de derrame que genera en otras actividades. “Los trabajadores de la construcción cobran su salario y se lo gastan en su barrio”, explicó.
Otro sector que todavía está en números negativos y cuyas perspectivas de recuperación se han ido postergando es el de hoteles y restaurantes, víctima de restricciones como toques de queda y cuarentenas.
El sector del comercio, por su parte, está entre los pocos que mejoran el desempeño acumulado al quinto mes del año. Argote añadió que esto se explica por el cierre del año pasado durante los meses de abril y mayo.
A medida que avance el año la tendencia de mejora se debe consolidar, ya que se seguirán comparando meses del año pasado con fuertes restricciones con meses de este 2021 con mayor libertad de movimiento y de trabajo.
