El impuesto oculto



Diariamente vemos titulares en Panamá acerca de los impuestos.

Vemos el “tira y jala” entre el Gobierno, economistas y los distintos grupos económicos (empresarios, trabajadores, jubilados, etc.) acerca de cuánto debería ser la tasa impositiva y para qué se deben usar los fondos que el Estado recauda.

Pero hay otro impuesto que todos los panameños pagamos y que nadie menciona.

Este impuesto es realmente nefasto porque no es cobrado por nuestro Gobierno, no nos beneficia aquí en Panamá y no hay forma de evitarlo.

El impuesto a que me refiero es la pérdida en el poder adquisitivo de nuestra moneda por la “inflación” del mismo por parte de Estados Unidos (EU).

Permítame explicarlo:

Este año el Gobierno de EU quiere gastar $3.82 billones (trillion en inglés).

Sin embargo, solo tiene proyectado recaudar $2.17 billones en impuestos.

Esto significa que va a quedar corto $1.65 billón.

Ahora bien, cuando un gobierno quiere gastar más de lo que gana, hay cuatro formas de financiar su déficit:

1.) Usar reservas,

2.) Aumentar impuestos

3.) Pedir prestado e

4.) imprimir “de la nada” el dinero que le falta.

Nota: esta última opción también es conocida como “inflación”, porque el Gobierno “infla” o aumenta la cantidad de dinero en el sistema para pagar sus cuentas.

El problema con la “inflación” es que si hay más dinero tratando de comprar la misma cantidad de bienes, los precios suben.

Vamos a analizar el caso de EU. Lamentablemente, el Gobierno tiene poco ahorros en reserva, así que de salida tenemos que eliminar esta opción.

En cuanto a subir impuestos, me parece que sería difícil hacer esto con una economía tan frágil y un pueblo tan económicamente golpeado.

Pedir prestado sería una posibilidad, pero los acreedores de EU ya están cuestionando su habilidad de repagar sus deudas.

Así que la única opción que le queda a EU es la “inflación”.

Y esto es exactamente lo que han estado haciendo.

Por años el Gobierno de EU ha estado imprimiendo billones y billones de dólares “de la nada” para salvar a instituciones financieras quebradas, para continuar guerras que no tienen sentido y para mantener la ilusión de sostenibilidad de una economía basada en consumismo.

Como panameños esto nos debe preocupar.

Acuérdese que casi todas las cosas (desde petróleo, hasta agricultura y ropa) están cotizadas en dólares y cuando EU “infla” su moneda, la misma pierde valor.

Esto significa que nos cuesta más dólares devaluados comprar la misma cantidad de combustible, comida, etc., en Panamá.

¡En otras palabras, cuando un panameño va al súper o llena su auto con gasolina y le cuesta 10% más que el año pasado, esta persona está financiando el déficit de EU a través de la pérdida de su poder adquisitivo!

Panamá no puede controlar la política económica de EU y, por ende, estamos forzados a pagar el impuesto oculto de la inflación.

Si quiere protegerse de esto, la única forma es diversificando sus ahorros a otras monedas, comprando activos “reales” que no pueden ser devaluados con una imprenta y cancelando sus deudas antes que la tasa de interés en EU (y por ende Panamá) se dispare.

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