Pareja presidencial de Venezuela se divorcia La esposa de Chávez espera que el presidente inicie los trámites legales de separación
CARACAS, Venezuela (EFE). La primera dama venezolana, Marisabel Rodríguez, anunció su separación del presidente Hugo Chávez, con quien se casó en 1997 y del que se alejó hace meses.
La esposa de Chávez, con quien tiene una hija, Rosinés, de cuatro años, confirmó en exclusiva a la edición de ayer, domingo, del diario caraqueño El Universal lo que era un secreto a voces desde hacía tiempo: que espera que el presidente inicie los trámites legales de separación.
Para nadie es un secreto que la situación del presidente y la primera dama está en un proceso de separación que ya ha pasado de lo personal a lo legal y es el momento de decirlo al país, afirmó Rodríguez, de 37 años, diez menos que el gobernante.
Creo que todos lo esperaban. No es una sorpresa para nadie, manifestó.
Muy apegada en lo político a Chávez en el primer año de su gobierno, pero ausente totalmente en los últimos meses, Rodríguez, ex locutora de televisión nacida en Barquisimeto el 24 de noviembre de 1964, expresó al periódico que nunca ha querido para sí el papel de una esposa de conveniencia.
Negó que se haya casado con la revolución bolivariana que encabeza su esposo desde febrero de 1999, como afirman sus críticos.
No quiero ser mártir de la revolución ni ser utilizada como un objeto político por la oposición, recalcó.
Dijo que ahora se va a dedicar a su familia, aunque temporalmente atenderá compromisos en la Fundación del Niño, institución oficial que preside desde 1999, año en que fue elegida diputada constituyente.
Chávez se casó en la década de 1970 con Nancy Colmenares, con quien tuvo tres hijos: Rosa Virginia, María Gabriela y Hugo Rafael, y conoció y se casó con Marisabel Rodríguez en 1997, durante la campaña electoral que lo llevó a la Presidencia en diciembre de 1998.
Cuando me comprometí con Hugo, lo hice con un hombre normal..., todo el resto de las cosas son circunstancias que han ocurrido alrededor de nosotros, manifestó al diario.
Añadió que está preparada mental y psicológicamente para la separación y el posterior divorcio, y negó que durante su matrimonio haya sido sometida a violencia doméstica por parte del presidente, rechazando las versiones que circularon en los últimos tiempos.
Calificó la situación como un momento difícil en lo personal, pero subrayó que Dios indica cuándo es el momento y ahora me lo ha indicado.
