El Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan) ha realizado seis pruebas para detectar de dónde proviene el sabor a tierra que se percibe en el agua que se consume en la capital, pero aún no han dado con la causa.
El director del Idaan, Abdiel Cano, precisó que las pruebas bacteriológicas, olor y carbón orgánico, así como los estudios a los tanques de almacenamiento, la cantidad de polímeros y provedores de químicos, resultaron negativos.
Cano reiteró que “el agua es apta para el consumo humano, y que quizás a través de las roturas que se han hecho en algunos proyectos de la capital se hayan introducido sedimentos en las líneas de distribución de agua”.
Esta versión es corroborada por el superintendente de la potabilizadora de Chilibre, Félix Robertson, quien agregó que las pruebas realizadas a la red de distribución y en áreas en donde los usuarios han presentado quejas, dan negativo.
También el ministro de Salud, Franklin Vergara, manifestó que iguales resultados se obtuvieron de los últimos análisis del Ministerio de Salud.
Por su parte, Adriano Espino, gerente de la División de Contratos de la Autoridad del Canal de Panamá, dijo que la calidad del agua es óptima, y sostuvo que es el Idaan el que debe determinar si hay algún tipo de responsabilidad en este caso por las constantes roturas del sistema de distribución.
