El jefe de la misión diplomática de Estados Unidos en el país, Stewart Tuttle, habla con La Prensa del papel de Panamá en la lucha anticorrupción, de los procesos seguidos al expresidente Ricardo Martinelli y de sus hijos, de la Lista Clinton y de la postergada ley de extinción de dominio, entre otros temas.
En Panamá, no hay condenas por corrupción y tenemos decenas de exfuncionarios procesados. El país, ¿coopera o no en la lucha contra la corrupción?
El presidente [Laurentino] Cortizo ha hecho hincapié en que la lucha contra la corrupción es sumamente importante. Nosotros tomamos eso muy en serio en temas de lavado de dinero y corrupción. Estamos desarrollando casos en conjunto con el FBI y oficiales panameños, para poder llevarlos a juicio. Estamos optimistas de que estos casos lleguen a un resultado.
Pero en este momento, ¿Panamá coopera o no?
Sí. Ofrecemos ayuda en la lucha contra la corrupción y el lavado de dinero, casos de impuestos y blanqueo. Hay un esfuerzo de poder enjuiciar y condenar a los delincuentes que se visten con camisa y corbata, que tienen buena pinta y vista al mar.
Pero, no hay condenas...
En este momento, no. Pero es importante que se tengan. Si hablas con GAFI, ellos dirán que el problema de Panamá no es de leyes sino de su implementación y cumplimiento. Y de la condena de personas. Eso es lo que falta y lo que se espera.
Somos un país tan chico... ¿es fácil influenciar en las decisiones judiciales?
Más que con el tamaño, tiene que ver con la condición humana. La clave para combatir la corrupción, que es un peligro para cualquier sociedad, es crear instituciones con controles y contrapesos, y con instituciones como la sociedad civil y los medios, que vigilan que las personas se comporten de una manera responsable.
Panamá solicitó la extradición de Ricardo Martinelli a Estados Unidos y Estados Unidos consideró que había elementos suficientes para enjuiciarlo. ¿Cómo evalúa usted el proceso posterior a la extradición?
Yo no he estado aquí durante todo el proceso, pero lo que queremos de cualquier proceso es que el sistema siga su curso sin trampas ni manipulaciones. Lo mismo que quieren los panameños.

Usted dijo que los jueces y magistrados que incurriera en casos de corrupción serían sancionado. En Panamá, ¿ustedes han sancionado a alguno?
No tengo esa información. Pero si sabemos de actos de corrupción de algún funcionario de la rama judicial, del Ejecutivo o de la Asamblea, tenemos el poder y la responsabilidad de proteger nuestros intereses, de prevenir que esa persona vaya a nuestro país a cometer otros actos de corrupción. Y lo haremos.
¿Qué podría pasar en caso que la Corte declare inconstitucional el caso pinchazos?
El derecho de juzgar la constitucionalidad de procesos en Panamá está en manos de la Corte. A nosotros lo que nos preocuparía sería si nos enteráramos de corrupción o manipulaciones al sistema. Si supiéramos que la decisión no fue tomada basada en interpretaciones de la Constitución, sino por otras razones, como favores personales o coimas. Si nos enteráramos de tales cosas a cualquier nivel del gobierno o incluso en la empresa privada, vamos a tomar medidas para protegernos y para defender el bienestar la democracia panameña, porque la corrupción socava la democracia y quita la confianza del pueblo.
¿Cuál sería la opinión de Estados Unidos si, después de haberlo extraditado, la justicia panameña determina que el proceso de Martinelli fue ilegal?
Esa sería una determinación del sistema panameño. Nosotros cumplimos con nuestra responsabilidad. Si el sistema judicial panameño decidiera eso en este o en cualquier otro caso por manipulaciones, coimas o favores políticos, sería muy preocupante. Y estaríamos muy decepcionados.
¿Por qué el resultado del caso Martinelli es importante para su país?
Es importante para los panameños. Para nosotros no es que sea más importante que otros, pero tiene un aspecto simbólico. Nuestro interés es un Judicial que opere como debe, de manera justa y recta para todos, sin importar las influencias políticas y económicas.
¿Cuándo esperan que se concrete la extradición de los hijos de Martinelli?
No sabría decirlo con exactitud. Tenemos el tratado de extradición con Guatemala y esperamos que se cumpla y no tengamos que esperar mucho más.
¿Hay actuales diputados o jueces panameños a los que Estados Unidos les ha retirado la visa?
Entre tantos que hay, supongo que sí…
Cuando Pedro Miguel González, prófugo de la justicia estadounidense y hoy secretario del partido oficialista, presidió la Asamblea, las consecuencias no se hicieron esperar con el TLC. ¿Qué consecuencia puede tener que al presidente de la Asamblea se le haya quitado la visa?
No puedo hablar de casos específicos de visas, pero nosotros trabajamos con las instituciones, no con las personas. Vamos a cooperar con la Asamblea, porque es representativa del pueblo y porque hay temas de importancia para nosotros que se presentan ahí. No creo que dejaríamos que tales situaciones obstaculizaran nuestra cooperación en temas que afectan a nuestros países. Vamos a seguir trabajando para defender nuestros intereses y fortalecer la relación con Panamá.
¿Son conscientes de la infiltración del narcotráfico en la política panameña?
Siempre nos preocupa la posibilidad de la infiltración del narcotráfico en cualquier ente político. El narcotráfico es muy problemático. Representa mucha tentación. Siempre estamos conscientes de ese problema y es una posibilidad que debe preocuparle a todo país.
¿Vienen nuevos integrantes a la Lista Clinton, dada la evidencia de corrupción ejercida en diferentes administraciones públicas?
No tengo información al respecto.
¿Cuándo vienen sanciones para el Triángulo Sur? Hasta ahora solo conocemos las del Triángulo Norte. ¿O somos impolutos?
La Lista Engel solo se aplica al Triángulo Norte. Esas sanciones vendrán cuando sea necesario y serán necesarias cuando opinemos que perjudica nuestros intereses, porque obviamente nosotros aplicamos esas sanciones para defender nuestros intereses. Cuando hay personajes que participan en la corrupción, esa corrupción perjudica a Estados Unidos. O directamente mediante el abuso del sistema financiero, por ejemplo, o indirectamente, por dañar la democracia en países amigos. Entonces es posible que tomemos medidas para poder ayudar a mejorar la situación e indicar los cambios que se deben tomar. Confiamos en la democracia panameña y queremos que se cuide por sí misma.
Las decisiones que toma el gobierno de Estados Unidos para sancionar a las personas, ¿se basa en investigaciones de ustedes o es imperativo que alguien presente una denuncia o querella en Panamá?
Se basa en toda la información que podemos recabar. Si hay un proceso que proporcione información, puede ayudar a las decisiones, pero no dependemos de eso.
Hay quienes lo señalan de intervencionismo. ¿Qué responde a eso?
No. Eso es ridículo. Como he dicho, cuando tomamos medidas como, por ejemplo, cuando quitamos o rechazamos visas o imponemos alguna sanción, lo hacemos porque es nuestro interés hacerlo. No podemos permitir que personas, donde quiera que estén, se aprovechen de nuestro sistema financiero para lavar dinero o cometer otros crímenes. Ni podemos permitir, como si no fuera nada, corrupción que daña la democracia en lugares que consideramos importantes o son amigos. La democracia es clave para la prosperidad.
¿Por qué les preocupa tanto la relación de Panamá con China?
No nos preocupa. Panamá es soberano y tiene derecho a tener relaciones diplomáticas con quien sea. Nosotros hemos tenido relaciones con China desde hace 50 años. A nosotros nos enorgullece ser el socio más importante de Panamá. El inversor más significativo, el que más intercambios bilaterales tiene, el mayor usuario del Canal... y todo eso va a seguir. Con tal que sea una relación responsable, no es un problema.
¿Por qué tendríamos que tener cuidado?
Cada país tiene que tener cuidado por sus propios intereses. En el caso de China, hay que medir los beneficios de contratos con compañías chinas en comparación con parecidos contratos con empresas de otros países, y decidir dónde está la ganga. Hay que buscar empresas que no manipulan, hacen las cosas de manera transparente y demuestran la capacidad de dar buenos beneficios al pueblo panameño.
¿Por qué hay tan pocos contratistas estadounidenses participando en licitaciones panameñas?
Hay muchos mirando posibilidades. Pero para atraer inversión de países responsables, donde las empresas toman sus propias decisiones, se tiene que empatizar y tener sistemas de inversión transparentes, con reglas claras para todos y que se cumplan. En esas condiciones va a haber muchísimo interés de empresas norteamericanas, pero se trata de establecer condiciones correctas para atraer inversiones. Eso es lo que esperamos.
Persecución judicial a periodistas y medios. ¿Atenta contra la libre expresión?
Ese fenómeno es sumamente preocupante. La manipulación del sistema judicial o las amenazas contra periodistas o miembros de la sociedad civil dirigidas a intentar callarlos es una preocupación, porque la libertad de expresión es clave para la salud de la democracia. Nosotros estamos interesados en que los medios y las organizaciones no gubernamentales que vigilan la actividad del gobierno prosperen, porque eso es clave para la democracia.
¿Por qué es importante que Panamá apruebe la ley de extinción de dominio?
Esa ley es una gran oportunidad para el país. Todos sabemos que, especialmente en esta época, hay muchas necesidades en educación, seguridad y programas sociales, y lo que lograría esa ley es que el Estado pudiera confiscar los bienes mal adquiridos de delincuentes y destinarlo a las necesidades del pueblo. Nadie honesto ni honrado tiene nada que perder con esa ley. Los únicos que deben temer son los delincuentes y corruptos.
