Un nuevo caso de maltrato y abuso infantil quedó al descubierto luego de que un juez de garantías de la provincia de Chiriquí ordenó la detención de cinco personas.
A estas personas se les imputaron los delitos de violación, privación de la libertad y maltrato en perjuicio de varios menores de edad, que mantenían retenidos en la población de Quebrada Satra, distrito de Ñurum en la comarca Ngäbe Buglé.
El juez de garantías, Erick Javier Polanco, decretó la detención de los cinco imputados, luego que el pasado martes agentes del Servicio Marítimo Nacional (Senan), a través de la “Operación Comagre”, lograron liberar a un grupo de niños que se mantenían retenidos en una residencia y quienes eran sometidos a maltratos por miembros de una secta religiosa.
Durante la audiencia, el juez Polanco acogió la petición del Ministerio Público de imputarles cargos por la presunta comisión de los delitos de violación, privación de libertad y maltrato, a los investigados, por considerar que se habían presentado indicios que acreditaban su vinculación a estos delitos.
Tras la decisión, uno de los abogados defensores presentó un recurso de apelación contra la decisión asumida por el juez Polanco, por lo que la audiencia ante el Tribunal Superior de Apelaciones del Tercer Distrito Judicial se agendó para el lunes 15 de abril.
En abril de 2023, en la comarca Ngäbe Buglé, cinco miembros de otra secta religiosa fueron detenidos por los delitos de intento de homicidio, privación de la libertad y maltrato al menor.
En esa ocasión, varias personas fueron sometidas a maltratos mientras se desarrollaba un rito por los miembros de la secta que operaba en esa región del país.
En otro caso, en enero de 2020, se registró la muerte de siete personas, entre ellas seis menores de edad, en la comunidad de El Terrón, corregimiento de Santa Catalina, también en la comarca Ngäbe Buglé, a manos de miembros de una secta religiosa.
Hasta ahora, las autoridades no han logrado establecer si estos hechos divulgados están relacionados con algún movimiento religioso que opera en la comarca o si se trata de eventos aislados.
Usualmente, estos hechos se han registrado en comunidades muy remotas de difícil acceso en las que no hay presencia policial.
