La ministra colombiana de Relaciones Exteriores, María Angela Holguín, objetó hoy cuatro puntos exigidos por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, como condición para reabrir la frontera, luego de que las autoridades del vecino país deportaron a miles de ciudadanos de Colombia.
Los cuatro puntos presentados por Venezuela fueron: contrabando, paramilitares, tasa cambiaria y control de los medios de comunicación, que fueron analizados por la canciller colombiana y su homóloga venezolana Delcy Rodríguez, de la cual las partes no llegaron a ningún acuerdo.
"No podemos por abrir o cerrar una frontera negociar absolutamente los valores, las creencias y los modelos políticos y económicos que el país decida", sostuvo la funcionaria a periodistas.
Según la funcionaria, el contrabando se inició luego de que el Gobierno venezolano empezó a subsidiar los alimentos en el vecino país y son sacados de Venezuela para revenderlos en Colombia.
"Nos piden que deroguemos nuestro régimen cambiario. Nosotros tenemos libertad, ellos controlan el régimen de cambios", precisó la funcionaria.
Para eliminar el contrabando, de acuerdo con Holguín, es necesario que los dos países se comprometan a eliminarlo, pues en la zona fronteriza actual hay bandas criminales dedicadas al contrabando y el narcotráfico.
"Nos pidieron que haya control a los medios de comunicación. La respuesta de Colombia es que aquí hay libertad de expresión, y ese es un tema que no se discute", comentó la funcionaria.
PETICIÓN DE SANTOS
Inicialmente, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, anunció que está dispuesto a reunirse con su homólogo venezolano, pero condicionó ese encuentro al cumplimiento de tres propuestas relacionadas con las deportaciones de miles de ciudadanos colombianos, que originó una crisis diplomática entre ambas naciones.
Santos pidió a Maduro que se abra un corredor humanitario en la frontera binacional para que 2 mil 67 niños puedan volver a sus escuelas en Venezuela.
Asimismo, el mandatario colombiano propuso como condición que Venezuela permita la salida de 15 camiones que tienen los enseres de personas que no pudieron ingresarlos a territorio colombiano.
"Y una tercera condición: exigimos que cumplan con los protocolos mínimos y no maltraten a los colombianos que van a ser deportados de Venezuela. Si esas condiciones, que son condiciones mínimas humanitarias, se cumplen, yo me siento a arreglar este problema", señaló el mandatario.
El presidente colombiano confió en que pueda solucionar las diferencias que tiene con Maduro luego de que este último cerró la frontera y deportó a miles de colombianos que estaban de manera ilegal en ese país.
Posteriormente de ese hecho, Santos retiró a su embajador en Caracas y Maduro hizo lo propio con su representante en Bogotá.
Santos anunció este miércoles que se decretará la emergencia económica en todas las zonas afectadas tras la deportación por parte de las autoridades de Venezuela de miles de ciudadanos colombianos, que están en albergues en el departamento de Norte de Santander (noroeste).

