El huracán Irma azotó el miércoles Puerto Rico con fuertes lluvias y poderosos vientos, dejando a más de 900 mil personas sin servicio de electricidad mientras las autoridades luchaban por llevar ayuda a las pequeñas islas del Caribe que ya fueron devastadas por la histórica tormenta.
Florida apresura su preparación ante un posible golpe directo en el área de Miami por parte de la tormenta de categoría 5, que tiene vientos potencialmente catastróficos de 297 kilómetros por hora (185 mph).
Casi todos los inmuebles de la isla de Barbuda resultaron dañados después de que el ojo de la tormenta prácticamente le pasó encima a primeras horas del miércoles, y alrededor del 60% de los casi mil 400 habitantes de la isla perdieron su casa, dijo a The Associated Press el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne.
“O quedaron totalmente demolidas o perdieron el techo”, dijo Browne después de volver a Antigua tras sobrevolar la isla vecina. “Es una situación realmente horrenda”. Dijo que los caminos y los sistemas de telecomunicaciones quedaron destruidos y que la recuperación tomaría meses o incluso años.
Un niño de 2 años de edad murió cuando su familia intentó escapar cuando su casa quedó destruida durante la tormenta, relató Browne. También se reportaron graves daños en San Martín, una isla que está dividida bajo control de Francia y Holanda.
Francia envió agua y alimentos de emergencia tanto a San Martín, como a San Bartolomé, en donde el paso de Irma dejó casas sin techo y destruyó el sistema eléctrico.
Para la noche del miércoles, el vórtice de la tormenta se ubicaba a 80 kilómetros (50 millas) al norte de San Juan, Puerto Rico, y avanzaba con dirección oeste-noroeste a una velocidad de 26 kilómetros por hora (16 mph). Más de la mitad de la isla de Puerto Rico se quedó sin electricidad, y hay más de 50 mil personas sin agua, indicó la agencia de manejo de emergencias de la isla.
En total, 14 hospitales utilizaban generadores después de quedarse sin luz, y varios caminos quedaron obstaculizados por la caída de árboles y postes. En la pequeña Isla Culebra se reportaron vientos sostenidos de 141 kilómetros por hora (88 mph) y ráfagas de hasta 177 kilómetros por hora (110 mph).
El Servicio Meteorológico Nacional dijo que no se ha visto un huracán de la magnitud de Irma en Puerto Rico desde el azote del huracán San Felipe en 1928, que causó la muerte de 2 mil 748 personas en Guadalupe, Puerto Rico y Florida.
Esta semana, el presidente Donald Trump aprobó una declaración de emergencia para Islas Vírgenes y Puerto Rico. Eso significa que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias y otras dependencias pueden retirar escombros y proporcionar servicios que serán pagados, en su mayoría, por el gobierno estadounidense.
REPÚBLICA DOMINICANA
Por su parte, el gobierno de República Dominicana comenzó evacuaciones preventivas en las zonas declaradas en alerta a la espera del huracán Irma, cuyos efectos empiezan a sentirse desde la noche de este miércoles en el país caribeño.
El monstruoso huracán Irma se espera provoque lluvias en las cosas este y noreste de Dominicana, aunque su ojo no tocará directamente en este país, informó la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet).
"Vamos a tener lluvias fuertes, ráfagas de viento y mareas de tempestad", dijo la directora de Onamet, Gloria Ceballos, en rueda de prensa en la presidencia.
Defensa Civil inició desalojos preventivos en las provincias en alerta máxima, así como en barrios vulnerables de Santo Domingo y algunas cárceles. La población se resguarda en sus hogares, atenta a la trayectoria de Irma.
El gobierno del presidente Danilo Medina dispuso el cese de actividades laborales para el jueves y suspendió clases en todas las escuelas y colegios del país por el resto de la semana.

