Una multitudinaria marcha contra el gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, terminó en violencia este miércoles 30 de mayo luego de que hombres armados abrieron fuego contra los asistentes.
Los disparos hicieron que miles de manifestantes corriesen para ponerse a salvo en la capital, Managua, y hubo reportes no confirmados que apuntaron que alrededor de una docena de personas resultaron heridas en el incidente.
Un fotógrafo de The Associated Press vio a una persona con una herida en la cabeza que estaba siendo trasladada en una camilla, con una sábana cubriéndole la parte superior del cuerpo, aparentemente muerta.
Los disparos parecían proceder de seguidores del gobierno y abrían sido efectuados hacia el final de la protesta. Los manifestantes, armados con lanzadores improvisados de botellas convertidas en proyectiles también atacaron durante el choque.
Según observadores de derechos humanos, más de 80 personas fallecieron en medio de la dura represión de las fuerzas de seguridad gubernamentales y grupos civiles aliados a unas protestas iniciadas en abril. Además, casi 900 personas resultaron heridas y más de 400 fueron detenidas.

