Investigadores de Ocean Conservancy (Estados Unidos) publican en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences el estudio ‘Un marco de evaluación cuantitativa del riesgo de mortalidad por ingestión de macroplásticos en aves marinas, mamíferos marinos y tortugas marinas’.
El artículo revisado por pares es el estudio más completo hasta la fecha para cuantificar hasta qué punto una variedad de tipos de plástico, desde plásticos blandos y flexibles como bolsas y envoltorios de alimentos; hasta trozos de globos; hasta plásticos duros que van desde fragmentos hasta artículos enteros como botellas de bebidas, provocan la muerte de aves marinas, tortugas marinas y mamíferos marinos que los consumen.
El estudio revela que, en promedio, consumir menos del equivalente a tres terrones de azúcar en plásticos para aves marinas como los frailecillos atlánticos (que miden aproximadamente 28 centímetros, o 11 pulgadas, de largo); poco más del equivalente a dos pelotas de béisbol en plásticos para tortugas marinas como las tortugas bobas (90 centímetros o 35 pulgadas); y aproximadamente el equivalente a un balón de fútbol en plásticos para mamíferos marinos como las marsopas comunes (1.5 metros, o 60 pulgadas), tiene un 90% de probabilidad de muerte. En el umbral de mortalidad del 50%, los volúmenes son aún más sorprendentes: consumir menos del equivalente a un terrón de azúcar en plásticos mata a uno de cada dos frailecillos atlánticos; menos del equivalente a la mitad de una pelota de béisbol en plásticos mata a una de cada dos tortugas bobas; y menos de un sexto de un balón de fútbol mata a una de cada dos marsopas comunes.
“Desde hace tiempo sabemos que las criaturas marinas de todas las formas y tamaños ingieren plásticos; lo que nos propusimos comprender fue cuánto es demasiado”, aporta la doctora Erin Murphy, autora principal del estudio y directora de investigación sobre plásticos en el océano de Ocean Conservancy . “La dosis letal varía según la especie, el tamaño del animal, el tipo de plástico que consume y otros factores, pero en general es mucho menor de lo que se podría pensar, lo cual es preocupante si se considera que cada minuto llega al océano una cantidad de plástico equivalente a la que llena un camión de basura”.
Para llegar a sus conclusiones, los científicos de Ocean Conservancy analizaron los resultados de 10,412 necropsias, o autopsias de animales, realizadas en todo el mundo en las que se conocía la causa de la muerte y los datos sobre la ingestión de plástico. De los animales estudiados, 1,537 eran aves marinas que representaban 57 especies; 1,306 eran tortugas marinas que representaban las siete especies de tortugas marinas; y 7,569 eran mamíferos marinos de 31 especies.
Los científicos estiman que más de 11 millones de toneladas métricas de plástico llegan al océano cada año. Gran parte de ese plástico son artículos de un solo uso, como los que suelen encontrar los voluntarios durante la Limpieza Internacional de Costas anual de Ocean Conservancy.
Desde 1986, más de 19 millones de voluntarios han retirado más de 400 millones de libras de basura de playas y vías fluviales de todo el mundo. Asimismo, han determinado que para abordar con éxito la crisis de la contaminación por plástico, necesitamos reducir la producción de plástico, mejorar la recolección de residuos y el reciclaje, y limpiar lo que llega al medio ambiente.


