El presidente iraní, Hasan Rohani, llamó este miércoles a la "unidad nacional" y pidió un cambio importante en la forma de gobernar en su país, admitiendo implícitamente que la catástrofe del avión ucraniano derribado en Teherán provocó una crisis de confianza en las autoridades.
El derribo del Boeing 737, provocado por un misil iraní el 8 de enero causó 176 muertos.
Las autoridades no reconocieron de inmediato su responsabilidad en la tragedia, lo que provocó manifestaciones de ira contra el ejecutivo y una ola de indignación desde el sábado.
La tragedia tuvo lugar en un contexto de importantes tensiones entre la República Islámica y Estados Unidos.
La animosidad entre ambos países ha ido creciendo desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, denunció unilateralmente en 2018 el acuerdo internacional sobre el programa nuclear iraní (2015), que había permitido la vuelta de Irán a la comunidad de naciones, y reestableció sanciones económicas contra Teherán.
La tensión tocó máximos con la eliminación, el 3 de enero en Bagdad, del general Qasem Soleimani, artífice de la estrategia iraní en Oriente Medio, en el ataque de un dron estadounidense.
En represalia, Irán lanzó misiles contra objetivos estadounidenses en Irak, lo que causó importantes daños materiales pero no dejó muertos entre las filas estadounidenses, según Washington.
Horas después, el vuelo PS752 de UIA se estrellaba. Pero hubo que esperar tres días hasta que las fuerzas armadas iraníes admitieron que habían abatido "por error" el avión.
Antes de ello, el gobierno −que afirma que no fue informado de lo sucedido hasta el viernes− había desmentido categóricamente que el Boeing hubiera sido derribado por un misil, tal y como aseguraba el gobierno canadiense desde el miércoles por la noche.
Haciendo alusión a una serie de acontecimientos “trágicos” ocurridos desde principios de enero, Rohani declaró que esto debería conducir a “una gran decisión” dentro del sistema político iraní.
“Y esta decisión importante”, añadió, “es la reconciliación nacional”.


