La opositora Brigada Décima de la Costa, perteneciente al moderado Ejército Libre Sirio (ELS), afirmó que ha recuperado el cadáver de uno de los pilotos del avión ruso derribado hoy, 24 de noviembre del 2015, por Turquía y que se estrelló en el noroeste de Siria.
En declaraciones por internet, Yahed al Ahmad, portavoz de ese grupo rebelde sirio integrado por árabes y turcomanos, explicó que sus combatientes recuperaron el cuerpo de uno de los dos pilotos del avión, que saltó en paracaídas desde el aparato.
Según Al Ahmad, "el piloto ya estaba muerto cuando tocó el suelo" y su cadáver fue trasladado por los milicianos de su brigada a una sala de operaciones que tienen en una zona en el norte de Latakia.
En cuanto al segundo piloto, Al Ahmad dijo que se desconoce su paradero, si cayó en una áreas que ellos controlan o si quedó en poder en manos del régimen sirio.
Anteriormente, el líder del Ejército Libre Sirio (ELS), el general Ahmed Berri, confirmó la muerte de un piloto ruso y la captura de otro por parte de los rebeldes.
La cadena turca CNN Turk informó que uno de los dos pilotos del cazabombardero Su-24 del Ejército ruso abatido por la fuerza aérea turca había fallecido, mientras que el otro estaba en manos de milicianos turcomanos de Siria contrarios al régimen del presidente Bashar al Assad.
Sin embargo, poco después la misma cadena citó a un mando militar turcomano que lucha en la región siria en la que se estrelló el cazabombardero ruso afirmando que habían matado a los dos pilotos cuando descendían en paracaídas.
Turquía notificó hoy por escrito al Consejo de Seguridad de la ONU el derribo de un avión militar ruso tras una supuesta violación de su espacio aéreo, lo que ha sido negado por Moscú, que asegura que el aparato no abandonó el territorio sirio.
El cazabombardero se precipitó en una región en el norte de la provincia siria de Latakia (noroeste), cerca de la frontera con Turquía, después de que sus dos pilotos saltaran en paracaídas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que el derribo del avión ruso en Turquía tendría serias consecuencias en la relación entre ambos países. "Representa una puñalada en la espalda por los cómplices de los terroristas. Yo no puedo describir lo que ha pasado hoy de otra manera", ha enfatizado según la cadena CNN.

