Cuando el candidato presidencial del PRD concedió, por primera vez en años, una entrevista ayer en Telemetro, los que pudieron verla se habrán dado cuenta del por qué motivo no las daba. No era porque esperaba el momento justo, pues de esos han sobrado, en especial, en los últimos meses, cuando estaba haciendo campaña –y el ridículo, con bailes y testimonios absurdos– para ser candidato. La entrevista refleja ignorancia en asuntos internacionales y una visión simplista y lejana de los problemas locales. Él vive una fábula, no la realidad. Por ejemplo, al abordar el tema de los problemas de la Caja de Seguro Social (CSS), dijo que se solucionarán con el dinero del contrato con la minera, pese a que los expertos han reiterado que no será ni remotamente suficiente. Afirmó que diálogo por la CSS no avanzó a causa de la pandemia y la guerra de Ucrania, lo cual equivale a mentirnos directo a la cara y con un cinismo que sobrepasa cualquier referencia que tengamos de la hipocresía. Y así, este señor quiso dorarnos la píldora a fin de que él pueda, con todo el peso de su incapacidad, inexperiencia y ausencia absoluta de sentido común, sentarse como el nuevo gobernante de Panamá. El PRD nunca se había equivocado tanto con un candidato.
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Hoy por Hoy
21 jun 2023 - 05:05 AM