Hoy por Hoy

Las donaciones sucias a las campañas electorales son la puerta de entrada a la corrupción. En Panamá, las donaciones del narcotráfico, aunque no se reconoce su existencia, están presentes y la mejor constancia son los funcionarios arrestados por actividades ligadas a este flagelo. Algunos hasta cierran filas, como ocurrió, en la Asamblea Nacional, donde hubo una fuerte oposición a la aprobación de una ley sobre extinción de dominio de bienes ilícitos, un proyecto impulsado por Estados Unidos, dadas las repercusiones que el narcotráfico en Panamá tiene en Norteamérica o el peligro que hay para los países vecinos, a causa de bandas criminales con poder en el Gobierno. Se necesita un esfuerzo conjunto de la sociedad y de los políticos honestos para detener el avance de la corrupción y para eso es importante examinar con lupa las donaciones a candidatos o partidos políticos. Urge dotar de instrumentos tecnológicos, peritos y herramientas a la autoridad electoral para verificar la información que entregan los partidos sobre sus donaciones. ¿Por qué hay que creerles si muchos de los funcionarios que salen de sus filas son incapaces de rendir cuentas sobre el uso de fondos públicos?