¿Sabía usted que París fue apodada “Paname” en referencia a Panamá? Más que una simple curiosidad lingüística, este apodo recuerda un capítulo fascinante de la historia compartida entre Francia y Panamá, lleno de simbolismo y conexiones inesperadas.
“Paname” es el pequeño nombre de amor que los parisinos dan a su ciudad. Pero no fue siempre así. El término surgió a finales del siglo XIX, cuando Francia emprendió un ambicioso proyecto deconstrucción de un canal interoceánico en el istmo de Panamá.
Bajo el liderazgo de Ferdinand de Lesseps —célebre por haber llevado a cabo el canal de Suez—, se creó la Compagnie Universelle du Canal Interocéanique, financiada en gran parte por miles de ciudadanos franceses que invirtieron directamente sus ahorros en este sueño de ingeniería global.

El entusiasmo inicial fue inmenso: el proyecto representaba el progreso, la apertura entre océanos y un puente entre continentes. Sin embargo, las enormes dificultades técnicas, sanitarias y financieras obligaron al cierre de la compañía en 1889. Esta situación generó una fuerte decepción en la opinión pública francesa. Fue en ese contexto que el nombre de “Paname” comenzó a circular en la prensa y en el lenguaje común con cierta carga irónica, como sinónimo de promesas no cumplidas para esos ciudadanos franceses de clase media que perdieron sus ahorros.
Sin embargo, el tiempo transforma los símbolos. Durante la Primera Guerra Mundial, los soldados franceses en el frente —los llamados poilus— comenzaron a referirse cariñosamente a París como “Paname” y a soñar con “volver a ver Paname”. Este apodo se convirtió entonces en una evocación afectuosa de la capital: una ciudad soñada, libre, alegre y luminosa, muy distinta al gris del campo de batalla. El término fue adoptado por la cultura popular francesa, anclado en canciones, literatura y el habla cotidiana como símbolo afectuoso de París. “Paname” es el título de una canción de Slimane en 2016, mucho después de la canción de Albert Chantrier (1916 – Tu le r’verras Paname!), de Maurice Chevalier, de Léo Ferré y de Booba.

Hoy, más de un siglo después, el tiempo es propicio para reafirmar los lazos entre Paname y Panamá, como durante la Primera Semana de Francia en Panamá (16-18 septiembre, Soho Mall), organizada por la Cámara de Comercio Franco-Panameña (inscripción gratuita https://shorturl.at/LnXBD). El año 2025 marca el 220 aniversario del nacimiento de Ferdinand de Lesseps, figura clave en la historia del canal. Esta conmemoración llega justo después de los 25 años de la recuperación plena del canal por parte del Estado panameño. Dos hitos que nos invitan a reflexionar sobre el camino recorrido y a construir juntos los puentes del mañana, con la mirada puesta en un futuro compartido.
Francia, que ha jugado un papel clave en la génesis de la nación panameña, y Panamá comparten compromisos con la paz, la soberanía y el respeto al derecho internacional. Nuestros dos países colaboran actualmente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en un momento de gran tensión internacional. Reforzar la cooperación, revalorizar nuestra historia común y expresar nuestra solidaridad son claves para fortalecer nuestro “canal de amistad”. Hoy, mi sueño es que todos nosotros seamos orgullosos de “Paname”, promesa de reencuentro entre Francia y Panamá, y que todos los panameños se sientan en París como en casa.
La autora es embajadora de Francia en Panamá.

