La iglesia católica, a través de la Comisión de Justicia y Paz, organizó el foro Yo Decido por Panamá, en el cual participaron cinco de los ocho candidatos a presidente de la República.
En el evento, con el cardenal hondureño Óscar Rodríguez Maradiaga como orador principal, estuvieron presentes Ricardo Lombana, candidato del Movimiento Otro Camino; Martín Torrijos, postulado por el Partido Popular; Gabriel Carrizo, aspirante del Partido Revolucionario Democrático (PRD) y el Movimiento Liberal Republicano Nacionalista, así como Maribel Gordón y Melitón Arrocha, ambos candidatos por la libre postulación.
El diálogo entre los candidatos se centró en la encíclica del Papa Francisco sobre la fraternidad y la amistad social, conocida como “Fratelli tutti”, la cual insta a todos a colaborar en la construcción conjunta de un mundo mejor.
De hecho, el arzobispo José Domingo Ulloa planteó que, por encima de las diferencias políticas, el objetivo debe ser el bien común para Panamá. “Un buen administrador es aquel que sabe distribuir equitativamente”, señaló.
Los candidatos
En relación a esto, Arrocha subrayó que la fraternidad es un principio que debemos cultivar. “Me comprometo a construir puentes de comunicación. Tenemos la responsabilidad de trabajar juntos, lo que implica promover políticas públicas que busquen el bien común”, acotó.
Por su parte, Lombana dijo que vivimos tal vez en el país más privilegiado de América Latina, pero no hemos tenido un sistema de justicia para que aquellos malos administradores rindan cuentas.
“Además, el sistema político que nos gobierna nos ha quitado la libertad a los ciudadanos para salir adelante por sí mismos, basándose en el esfuerzo”, apuntó.
Mientras que Carrizo argumentó que la política no puede someterse a la economía y nadie puede creerse estar por encima del otro. “El peor acto de corrupción es la doble moral”, puntualizó.
Convivencia humana
Durante su intervención, Torrijos manifestó que en Panamá nos hemos concentrado en resolver el tema económico, pero no la convivencia humana.
En su opinión, esto no se ha podido desarrollar debido a nuestra incapacidad de diálogo. “Hay que redefinir nuestra democracia, pero también redefinir el país y establecer confianza”, dijo.
Por otro lado, Gordón consideró que existe una necesidad urgente de que la política económica esté orientada hacia las necesidades sociales de la nación.


