El parque del Mirador, ubicado a un costado de la vía que conecta con el Puente de las Américas, se ha convertido en el centro de atención luego de que, la noche del 27 de diciembre, la Alcaldía de Arraiján ordenara la demolición del monumento que recordaba la presencia histórica de la comunidad china en el país.
El monumento fue erigido en 2004 como símbolo de la unión cultural entre Panamá y China. La estructura incluía una puerta o paifán —arco tradicional chino—, una pagoda de estilo tradicional y un obelisco con inscripciones que evocaban los 150 años de presencia china en Panamá. En la entrada, dos leones de piedra fungían como guardianes del parque.

Este domingo, turistas que acudieron al mirador para tomarse fotografías se encontraron con un espacio arrasado por maquinaria pesada, con desechos de escombros aún visibles.

Los leones de piedra se salvaron de la demolición, pero fueron desplazados a un rincón del estacionamiento.
Durante la noche del sábado, representantes de la comunidad china en Panamá lograron rescatar entre los escombros la placa conmemorativa de los 150 años, la cual estaba partida en varios fragmentos, además de otros vestigios de la estructura.

La demolición, ordenada por la alcaldesa de Arraiján, Stefany Peñalba, fue deplorada por el Gobierno Nacional, desde el presidente José Raúl Mulino hasta varios ministros y la Cancillería panameña, que expresaron su rechazo a lo ocurrido.
