Ya faltan pocas horas para la llegada de la Nochebuena, la víspera de Navidad en la que familias y amigos se reúnen para celebrar con cenas, tradiciones y la espera del nacimiento de Jesucristo.
En Panamá, la mesa navideña suele estar cargada de platos emblemáticos como arroz con guandú, ensalada de papa, tamales, plátanos en tentación, pollo, jamón, pavo y el infaltable ron ponche. Una oferta deliciosa y abundante que forma parte de la identidad cultural del país.

Sin embargo, disfrutar de estas tradiciones no significa descuidar la salud. Mantener una alimentación balanceada y hábitos saludables durante la temporada de fin de año es clave para proteger el bienestar general, incluso cuando el menú navideño invita a los excesos. Así lo recuerda la doctora Débora Arosemena, médica especialista en nutrición de Hospiten Paitilla.
“La nutrición balanceada y el estilo de vida saludable deben practicarse los 365 días del año. Las fiestas, viajes y reuniones sociales forman parte de la vida, pero es importante aprender a disfrutar sin excesos, especialmente en el consumo de postres y bebidas alcohólicas”, señaló la especialista.
Arosemena explicó que en esta época suelen aumentar los compromisos sociales, el estrés por las compras y la carga de responsabilidades, factores que afectan el descanso y las emociones. “Esta carga emocional puede generar irritabilidad y cambios de humor, llevando a muchas personas a comer de forma compulsiva, principalmente alimentos altos en azúcar, sal y grasas”, advirtió.

Entre sus recomendaciones, la doctora sugiere optar por desayunos y almuerzos más ligeros, dejando espacio para una comida más completa o tipo cóctel en horas de la tarde, además de mantener una rutina diaria de actividad física para contrarrestar los posibles excesos.
Respecto a las cenas de Navidad y Año Nuevo, aconseja moderar el consumo de alimentos altos en calorías y grasas saturadas como pernil, jamón, soufflés, ensalada de papa, dulces navideños, ron ponche y turrones, ya que su ingesta excesiva puede afectar la salud.
“El alcohol y las bebidas azucaradas elevan considerablemente el aporte calórico. Un solo trago puede contener entre 180 y 250 calorías. Además, estas bebidas alteran la retención de líquidos y el estado emocional: inicialmente pueden generar euforia, pero luego provocar decaimiento y afectar los reflejos y el estado de alerta”, explicó.
Como opciones más saludables para la cena navideña, la nutricionista recomienda pavo, arroz con guandú, arroz con pollo, ensaladas verdes y frutas frescas como postre, junto con una adecuada hidratación mediante el consumo regular de agua.
“Cada persona tiene necesidades nutricionales distintas según su edad, peso, nivel de actividad física y condiciones de salud. Por eso, lo ideal es acudir a un especialista en nutrición que realice una evaluación personalizada y oriente sobre cómo mantener una rutina saludable incluso después de las fiestas”, enfatizó.

Consejos para disfrutar las fiestas sin descuidar la salud
+ Cuida las raciones: sirve porciones moderadas y evita repetir en exceso.
+ Controla el consumo de azúcar y sal, especialmente en postres, bebidas y alimentos procesados.
+ Come despacio y con tranquilidad, masticando bien los alimentos para favorecer la digestión y la saciedad.
+ Incluye verduras en los menús prenavideños, ya sea en ensaladas, al vapor o a la plancha.
+ Prefiere frutas de temporada como postre: son más ligeras y aportan más nutrientes.
+ Mantente bien hidratado, priorizando el consumo de agua o agua con limón.
+ Consume alcohol con moderación, alternándolo con agua y evitando excesos.


