Los correos maliciosos, que se envían con la intención de interrumpir la computadora o la red, son un vector de ataque muy utilizado por los ciberdelincuentes. Por este motivo, es necesario el uso de soluciones integrales de seguridad, las que pueden mitigar el impacto que sean capaz de tener este tipo de amenazas.
Hay diversas formas de proteger la información de estos correos, expertos en este ramo ofrecen algunas recomendaciones.
Es preciso actualizar los sistemas operativos y aplicaciones. De esta forma, se protegerán de vulnerabilidades que muchas veces son usadas a través de un código malicioso para ingresar o robar información de manera remota a los sistemas, explica Lucas Paus, especialista en seguridad informática de ESET Latinoamérica.
Recomendación
También deben optar por el uso de sistemas de anti spam. El spam es un término que hace referencia a los "correos basuras", los que pueden usarse para mandar códigos maliciosos, señala por su lado el técnico en informática Luis Sánchez.
Por esta razón, es recomendable contar con una solución que le permita bloquear este tipo de ataques, filtrando correos de dudosa procedencia, recalca Paus.
Además, reiteran que se debe mantener el antivirus actualizado e integrado con la aplicación de correos, pues será la capa más importante para una temprana detección y bloqueo de algún código malicioso, que podría llegar a través de algún correo malintencionado.
No obstante, un factor que también juega un papel primordial es la concienciación, dice Paus.
"La educación es un arma potente a la hora de detectar este tipo de ataques. Mediante la concienciación, un usuario podrá evaluar cuándo un correo es de procedencia dudosa o posee algún código malicioso que pueda comprometer la seguridad del sistema".
Advertencia
No confíe en archivos no solicitados o en vínculos integrados en el mensaje, aunque provengan de empresas o de amigos de confianza, advierte.
En este sentido, Sánchez recalca que es sencillo crear o modificar correos y así engañar a la persona para que esta crea que la información viene de un remitente que es confiable.
Paus agrega que no se debe presumir que los vínculos, los números telefónicos y las direcciones de correo electrónico integradas al mensaje son correctas.
Hay muchas formas de disfrazar un vínculo malicioso para que parezca algo distinto, ya sea que esté en un e-mail, un chat o una vía similar.
En estos casos deben ser siempre cautelosos, sostienen los expertos.

