El ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander, reconoció que las dificultades financieras por las que atraviesa la Caja de Seguro Social (CSS) pueden tener un impacto en las finanzas públicas.
“La parte que tiene que ver con pensiones y jubilaciones es importante desde el punto de vista social. Se requiere estar seguro de que se tiene un flujo de caja para hacer frente al pago de pensiones y jubilaciones. En el momento que empezamos a tener problemas, las finanzas públicas se van a ver afectadas de forma adversa. Lo que más preocupa no es solo el efecto sobre las finanzas públicas, sino la situación de los pensionados y jubilados. La idea es que nunca falte ese cheque”, dijo el titular de la cartera de Economía a preguntas de este medio.
El ministro Alexander hizo estas declaraciones antes de entrar a una reunión con directivos de la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (CCIAP) y poco después de que el director de la Caja de Seguro Social, Enrique Lau Cortés, anunciara que en los dos últimos años se han utilizado parte de las reservas del programa definido de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) y que las mismas se estarían agotando en 2023 si no se toma ninguna medida.
De este programa salen las pensiones y jubilaciones que cobran los ciudadanos en Panamá.
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El presidente de la CCIAP, Jorge Juan De La Guardia, dijo que el tema de la CSS no se puede postergar.
"Esperamos que este año podamos iniciar las conversaciones y tener una mesa de trabajo. Esperamos pronto los estados financieros auditados para conocer la situación real y tomar las medidas correctivas para garantizar la sostenibilidad de la CSS”, dijo De La Guardia.
Por su parte, la presidenta de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa, Mercedes Eleta de Brenes, señaló que la situación del programa de IVM puede desatar una “crisis gravísima” en el país y afectar las finanzas públicas, la economía nacional y la economía individual de todos aquellos que dependen de una jubilación”.
Los líderes gremiales consultados coinciden en la necesidad de tomar decisiones sobre el futuro del programa de pensiones, algo que no se hizo, tal como se requería, en las dos últimas administraciones gubernamentales.
“El país requiere que se asuma la responsabilidad política de tomar las decisiones correctas. Deberíamos dar una solución técnica y luego ver cómo se viabiliza políticamente. Ya es tarde, pero todavía podemos hacer algo”, afirmó Eleta de Brenes.
“Todos debemos entender que tenemos que hacer sacrificios para poder rescatar el programa de IVM”, indicó la ejecutiva.
Entre los eventuales sacrificios dijo que es probable que se tenga que subir la densidad de las cuotas y la edad de jubilación. “Esto se requiere hacer o va a reventar el sistema. Dentro de tres años no va a haber recursos para pagarle a nadie”, puntualizó Eleta de Brenes.
