Han pasado cuatro meses desde que se fraguara el acuerdo que pone fin a los litigios comerciales entre el Gobierno de Panamá y las filiales de Finmeccanica: Selex, AgustaWestland y Telespazio Argentina.
La senda penal del delito de corrupción internacional en Panamá continúa abierta y el próximo 7 de octubre se sentarán nuevamente en el banquillo de los acusados del Tribunal de Roma, Valter Lavítola, y el ex director comercial de Finmeccanica, Paolo Pozzessere.
Mientras tanto, los términos del pacto se van implementando. El contralor Federico Humbert ya refrendó los acuerdos. Los abogados del Estado deberán ahora comunicar oficialmente a la Sala Tercera de la Corte la conclusión de los acuerdos.
La empresa, por su parte, deberá retirar los radares por su inutilidad en la lucha contra el narcotráfico y devolverle a Panamá, en forma de un crédito, 29 millones de euros. Además, se está fabricando un helicóptero ambulancia por un valor de 8.1 millones de euros que recibirán los panameños a título gratuito como retribución al sobreprecio que en origen fue pactado en los contratos para desviar parte del dinero en favor de Agafia Corp.
EL CONTRATO PEQUEÑO
El tercer contrato, el de menor valor, fue firmado por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) con Telespazio. Consistía en el levantamiento de un mapa digital de todo el territorio nacional.
Al momento de la suspensión del contrato por parte de la administración Varela, los trabajos se encontraban adelantados en un 80%.
Al igual que los otros dos contratos, la contratación de la cartografía digital se hizo sin ningún tipo de análisis o antecedentes técnicos que avalen la conveniencia de este equipo.
De hecho, para poder adaptar sus servicios técnicos a las necesidades de Panamá, hubo que agregar dos elementos adicionales –un mapeo por radar en banda “P” y un centro de procesamiento de imágenes- al poco tiempo de que empezara la ejecución del contrato.
Estos trabajos adicionales son otra prueba de que los contratos fueron hechos de manera apresurada. De haberse consultado a los técnicos antes de la firma, se habría establecido desde el principio el mapeo con imágenes en banda “X” y “P”.
“Si Panamá hubiera preparado -como dictan las normas de contratación pública- un documento que incluyera las necesidades cartográficas del país y lo hubiera incluido en un pliego de cargos, con certeza nos hubiéramos ahorrado la necesidad de reformar el contrato original y su consecuente aumento en el precio”, señaló el embajador de Panamá en Italia, Fernando Berguido.
El contrato para el mapa digital fue suscrito por el entonces titular del MOP, Federico José Suárez (hoy con medida cautelar de impedimento de salida del país por otro caso) y Telespazio Argentina, una de las filiales de Finmeccanica.
El hoy famoso memorándum de entendimiento, firmado en 2010 por el presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, y el entonces primer ministro Silvio Berlusconi, no incluía la contratación de cartografía digital. El exministro de Seguridad Pública José Raúl Mulino ha repetido de manera falaz que ese acuerdo comprometía al Gobierno panameño a la compra directa a empresas subsidiarias del coloso de equipos de defensa italiano.
ACTUALIZACIÓN
A pesar de su contratación irregular, lo cierto es que Panamá necesitaba actualizar su cartografía: la existente es a escala 1:50,000 y data en su mayor parte de los años 60. Se encuentra desfasada y en algunas áreas, como en Darién, es casi nula.
El director del Instituto Geográfico Nacional Tommy Guardia (Igntg), Israel Sánchez, señala que “para Panamá es muy importante la actualización de su cartografía a escala 1:50,000 porque el 40% de esta cartografía tiene un atraso de más de cuatro décadas y, por otro lado, en el 21% del territorio no existe información. Esto significa que el 60% de cobertura de mapas a escala 1:50,000 pasan a ser mapas históricos y/o sin información”.
Consultado por el proyecto convenido con Telespazio, Sánchez aclara que, más que un solo mapa digital, se obtendrán “814 mapas topográficos a escala 1:25,000 que cubre 76,000 km2 de territorio y 1,222 mapas urbanos que cubren las principales ciudades de la República de Panamá”.
El proyecto había sido ejecutado en un 80% antes de su suspensión pero, según Sánchez, para que funcione completamente la instalación del mapa digital “es indicativo culminar el 20% restante del proyecto”.
“La producción cartográfica masiva no puede ser llevada adelante por Igntg, debido a la falta de recursos (humano y equipos) que permitan realizar los procesos necesarios para la elaboración de estos mapas. Por lo anterior, la ejecución por parte del Igntg le tomaría unos tres años y como resultado del tiempo que tomaría se obtendrían mapas desactualizados, esto debido a que las fuentes utilizadas datan de 2012, 2013 y 2014 como última toma de fotos e imágenes”, explica el responsable del Igntg.
VIRTUDES PRÁCTICAS
Con la renovación del contrato con Telespazio son imágenes de radar en banda “X” y banda “P” que “constituyen la fuente primaria para la elaboración de mapas topográficos, porque a partir de los modelos digitales del suelo y los modelos de superficie se permite obtener curvas de nivel, drenajes, elementos esenciales en un mapa topográfico”.
En las áreas boscosas del país, por ejemplo, que cubren la mayor parte del territorio, con la banda “X” se refleja en las imágenes un gran manto verde. La adición de la banda “P” permite captar lo que hay debajo de la copa de los árboles, o sea, que hay debajo de dicho manto.
Para el embajador Berguido estas adiciones hacen sentido. “Si el país se iba a gastar una millonada en el levantamiento digital de su superficie, tiene sentido que se haga con tecnología de punta que nos permita conocer todo lo que hay a ras de suelo. Lo que no tiene justificación es que no se hubiera hecho un acto público para recibir las mejores propuestas y precios al momento de contratar”.
PROCESAMIENTO DE IMÁGENES
Sobre el centro de procesamiento de imágenes -que fue la otra adición que se le hizo al contrato original- Sánchez explica que es “el mecanismo para que el Igntg explote con un centro de procesamiento propio todo el potencial que tienen las imágenes”.
A partir del análisis de las imágenes se pueden obtener datos para la ejecución de proyectos de todo tipo, entre ellos: planificación y ejecución catastral, estudio tenencial de tierras, planificación y monitoreo agrícola, evaluación de recursos hídricos superficiales, estudios mareográficos, geología e identificación de manchas de petróleo. “Se ha capacitado al personal con la finalidad de que puedan utilizar toda esta información, (imágenes y modelos digitales)”, agrega Sánchez.
Panamá puede obtener beneficios concretos una vez cuente con esta tecnología. En la última Cumbre del Clima de París, por ejemplo, Panamá logró la inclusión de sus bosques tropicales como sumideros de carbono. Es el mapa digital el que podrá ayudar a cumplir con este objetivo. “Con este proyecto se obtienen mapas topográficos más confiables de áreas donde se carecía de información base y donde existe una mayor cobertura de bosques, así mismo se puede contabilizar por niveles altitudinales el estado de los bosques, entre otros análisis que se pueden realizar con estas imágenes cartográficas y modelos digitales”, explica el director del Igntg.
Lo que se pagó y lo que se ahorró con el acuerdo
En las postrimerías del gobierno Martinelli se venció el contrato con Telespazio. La filial de Finmeccanica había recibido en euros 6,616,118.72, equivalente a poco menos del 50% del valor total del proyecto que costaba originalmente 15.8 millones de euros.
A este monto había que adicionarle el costo de las “extras” que en su momento había pedido Panamá para la inclusión del sistema de mapeo por radar en banda “P” y del centro de procesamiento de imágenes. Esto es, unos 3.6 millones de euros más. Tanto el contrato original, como las extras, estaban adelantados en un 80%.
Jugó a favor de Panamá en las tensas negociaciones con la empresa semipública italiana, que el contrato para la compra del mapa digital establecía que debía ser entregado e instalado el 27 de abril de 2014.
A diferencia del contrato con Selex, en el que el entonces ministro de Seguridad Pública, José Raúl Mulino -a través de una resolución ministerial, justo después de la derrota de Cambio Democrático en las elecciones- extendió el plazo de entrega por nueve meses adicionales favoreciendo a la empresa italiana, en el contrato con Telespazio el incumplimiento de los plazos por parte de la compañía supuso una ventaja en el proceso para llegar al acuerdo final.
Contrario al caso de los radares, en el que el Ministerio de Seguridad Pública prorrogó el contrato poco antes del cambio de gobierno, “en este caso, y es justo reconocerlo, el titular del MOP, Jaime Ford, no prorrogó este contrato, lo que nos colocó en una posición más favorable al momento de renegociar”, aseguró Berguido.
Panamá, como parte de la negociación global con Finmeccanica aceptó permitir la conclusión de este contrato, o sea, el 20% restante. Como condición a la extensión del tiempo y la aceptación de las extras, la parte panameña exigió dos cambios.
“El primero fue que Telespazio utilizara y pagara por un activo que poseía el Igntg, la toponimia. Los mapas deben incluir el nombre propio de cada calle, río, quebrada, cerro y accidente geográfico. Ese banco de datos ya lo tiene el Igntg y, para incorporarlo a la nueva cartografía, se le dio un valor. Se determinó una cifra nada despreciable: 1.3 millones de euros. Y ese precio lo descontaríamos de los pagos”, contó Berguido.
El segundo, que resultó crucial para conseguir cerrar la renegociación, fue salirse del esquema financiero de los bancos.
Los contratos entre Panamá y las filiales de Finmeccanica estaban condicionados a un esquema de financiamiento internacional con un sindicato de bancos liderado por Citibank. La renegociación permitió desistir del mismo. Este hecho permitió al Estado panameño un doble ahorro. El saldo por pagar ya pactado incluía intereses bancarios por 707,824 euros. Panamá, en vez de pagarle a los bancos para que estos a su vez pagaran a Telespazio, lo haría directamente al proveedor, ahorrándose los intereses. Además, Panamá quedó liberada de una cláusula pactada originalmente que estableció la tasa de cambio a un monto fijo de 1.32 dólares por euro. “Al quedar liberado de esa cláusula, nuestro país pagará ahora la deuda a la tasa actual, cerca de 1.12. En otras palabras, nos estamos ahorrando otros 2 millones de dólares” afirmó el embajador.
Por esto, al excluir los gastos relativos a la financiación bancaria y sumando el importe de la venta de los nombres toponímicos recopilados por el Igntg, Panamá no tendrá que desembolsar ningún costo adicional, ya que los extras incluidos en la nueva adenda serán cubiertos con estas maniobras financieras.
Una última solicitud de parte de Panamá fue finalmente aceptada por los ejecutivos italianos. Se convino que Panamá podría utilizar 1 millón de euros del crédito de 29 millones de euros, resultado de la anulación del contrato suscrito con la filial de Finmeccanica, Selex, por la compra de los radares para pagar por los trabajos del mapeo digital. Telespazio tendrá nueve meses de prórroga para culminar y entregar los trabajos contratados una vez la Sala Tercera de la Corte Suprema dé su visto bueno.