El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) aclaró que su recomendación sobre el mirador, ubicado en el área del puente de las Américas, fue exclusivamente para la reparación y mejora de la estructura, y no para su demolición, luego de la controversia generada por la destrucción del monumento chino.
A través de un comunicado oficial, la entidad informó que realizó evaluaciones técnicas en el sitio como parte de sus acciones permanentes de monitoreo, prevención y gestión del riesgo, tanto por reportes ciudadanos como a solicitud de la Alcaldía de Arraiján, a cargo de Stefany Peñalba.
En todos los casos —precisó el Sinaproc— se recomendó la reparación de la estructura, sin contemplar su demolición.
La institución lamentó que consideraciones de seguridad y prevención, orientadas únicamente a proteger la vida humana, hayan sido utilizadas como justificación para la demolición de una obra monumental emblemática y de alto valor cultural para la comunidad chino-panameña.

Demolición nocturna sin anuncio previo
La aclaración del SINAPROC se produce luego de que, la noche del sábado 27 de diciembre, excavadoras ingresaran al área del mirador y demolieran el monumento chino, así como otras estructuras asociadas al sitio.
La operación fue coordinada por la alcaldesa de Arraiján y se ejecutó sin anuncio público previo, sin una consulta conocida con la comunidad afectada y en horario nocturno.

Videos difundidos en redes sociales muestran maquinaria pesada derribando el conjunto arquitectónico mientras ciudadanos observaban desde la distancia; algunos agentes municipales tenían el rostro cubierto.
El monumento había sido inaugurado en 2007 con motivo de los 150 años de la presencia china en Panamá y simbolizaba el aporte histórico, social y económico de esta comunidad al país.
Reacción del Gobierno Nacional
Ante los hechos, el Gobierno de José Raúl Mulino rechazó de manera expresa la destrucción del monumento chino y ordenó su restauración inmediata en el mismo sitio, al considerar que se trata de un elemento cultural ancestral que representa a una comunidad con más de 170 años de presencia en Panamá.
“El Gobierno precisa que no existió ninguna coordinación ni comunicación con las autoridades nacionales antes de que se ejecutara la remoción del monumento”, señala la postura oficial. Asimismo, se instruyó coordinar la restauración con la Comunidad China de Panamá y el Ministerio de Cultura.
El área del mirador forma parte de un espacio emblemático vinculado históricamente al Puente de las Américas, una de las principales obras de infraestructura del país y símbolo de la conexión territorial panameña, intervenido desde 2004 para fines turísticos y de contemplación.


