El ministro de Seguridad Pública, Frank Ábrego, reconoció que el freno al tránsito masivo de migrantes por la selva del Darién ha dejado un impacto económico profundo en las comunidades indígenas que durante años dependieron de ese flujo como fuente de subsistencia.
“Gran parte de la comunidad indígena por donde transitaban los migrantes impactaban económicamente a través del cobro y la venta de comida, el transporte en piragua. Esta situación ha traído como consecuencia el aumento, por decirlo de alguna forma, del desempleo en esta región”, señaló Ábrego.

El ministro detalló que programas del Ministerio de Desarrollo Agropecuario y del Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) se han volcado hacia estas comunidades para mitigar la pérdida de ingresos, mediante la entrega de alimentos a menor costo. Paralelamente, el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), junto con el Instituto Nacional de Formación Profesional y Capacitación para el Desarrollo Humano, impulsa capacitaciones para insertar a los residentes en actividades productivas distintas al tránsito de migrantes. Entre ellas, se mencionan proyectos de reforestación y limpieza de ríos, con apoyo de fondos canalizados a través de organizaciones no gubernamentales.

No obstante, la provincia de Darién históricamente ha sido una de las más olvidadas por los gobierno. Carece de inversión en infraestructura, servicios básicos y oportunidades de desarrollo que permitan a sus comunidades alcanzar condiciones de vida dignas como las del resto del país.

La provincia de Darién, ubicada en el extremo oriental de Panamá, enfrenta altos niveles de pobreza, desempleo y acceso a servicios básicos. Según datos del Ministerio de Economía y Finanzas, la pobreza extrema en Darién alcanzó el 16.2% en 2023, una cifra considerablemente superior al promedio nacional del 9.6%.
El acceso al agua potable es una de las principales carencias estructurales que enfrenta la región. Según datos de la Evaluación Nacional de Preparación ante Desastres, solo el 11.6% de los hogares en Darién tiene acceso a agua potable mejorada, lo que representa la cobertura más baja del país.
La otra cara: la seguridad interna
Ábrego también se refirió a la situación de inseguridad urbana, un tema que, según admitió, no siempre está vinculado al narcotráfico.“El presidente habló del movimiento de drogas. Sin embargo, en los barrios, en las casas, estos robos que se dan en casas, en barrios secuestrados, esto no es droga”, dijo.
El titular de Seguridad destacó que las autoridades realizan diariamente entre 150 y 300 detenciones, además de decomisos de armas y drogas, y operativos en cárceles. “La Fuerza Pública está trabajando fuertemente en esas tareas”, insistió.
Durante la conferencia de prensa de este jueves, el presidente José Raúl Mulino puso el dedo sobre los distritos más vulnerables de la seguridad nacional: San Miguelito, Panamá y Colón.
“En este momento, a 17 días del mes de agosto, la tasa nacional anda por el orden de 8,2 por cada 100 000. Sin embargo, tenemos incidencias delictivas que suben en algunas provincias como Panamá, Panamá Oeste y Colón, hasta 14 por cada 100 000. Esto es bastante”, afirmó.

