El escándalo suscitado tras la contratación directa por 250 mil dólares para rediseñar la página web de la Defensoría del Pueblo, ha hecho surgir varías voces de protesta respecto a la funcionalidad de la institución.
En ese contexto, el diputado del opositor Partido Panameñista Luis Eduardo Quirós indicó este martes, 28 de mayo a Prensa.com que la Defensoría “debería ser un ente que constantemente estuviera exponiendo aquellas situaciones que van en contra de la ciudadanía” y agregó que aunque es una entidad que no tiene poder coercitivo, debe ejercer su labor de hacer llamados públicos de atención.
Por su parte, el también panameñista Alcibiades Vásquez expresó que esta es “una institución que lamentablemente es inoperante, no se se siente, no se ven sus actividades y mucho menos sus resultados”, pareciera que es una institución para mantener burócratas, dijo, porque de hacerse una medición costo-beneficio, definitivamente ha sido mayor el costo que les ha acarreado a los contribuyentes de este país que los beneficios.
Agregó que para cambiar esta situación se debería cambiar la ley que crea la Defensoría para que “al menos algunas de sus acciones sean vinculantes y se haga sentir”.
Leandro Ávila, del opositor Partido Revolucionario Democrático, señaló que esta “es una Defensoría prácticamente nula” y agregó que este tipo de instituciones se deben utilizar para alertar al Órgano Ejecutivo cuando no esté haciendo las cosas bien; sin embargo, al guardar silencio permite que se sigan cometiendo los desórdenes que se están dando en este momento.
Todos coincidieron en que el tema del notable sobrecosto en la contratación, es sumamente serio y complejo y no es suficiente con que la Defensoría del Pueblo haya enviado un escueto comunicado diciendo que todo fue hecho transparentemente.
Pidieron seriedad en el asunto y que se desarrolle una investigación que conduzca a aclarar este hecho particular.

