Dinero estatal pagó deudas de Henri Mizrachi con la Caja de Ahorros

Dinero estatal pagó deudas de Henri Mizrachi con la Caja de Ahorros


Condotte Panamá, empresa que formó parte del consorcio que en 2012 se adjudicó la construcción de la Ciudad Deportiva de Colón –a un costo de $64.6 millones–, fue una de las ocho sociedades que aportó fondos para pagar préstamos por $7 millones que le concedió la Caja de Ahorros (CA) a Henri Mizrachi Kohen.

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Caja de Ahorros aportó $7 millones a New BusinessSociedades para ocultar a los verdaderos propietarios de Epasa

El préstamo de la CA a MIzrachi terminó en cuentas de la sociedad New Business, usada para comprar Editora Panamá América, S.A.

Según documentos de las autoridades judiciales, Condotte dio a Mizrachi tres cheques que sumaron $600 mil, para contribuir al pago de la deuda con la CA.

Se ha logrado corroborar categóricamente que Condotte utilizó dinero del Estado para contribuir a la cancelación de los préstamos solicitados por el señor Henri Mizrachi”, asegura un informe de la fiscalía a cargo de la investigación.

Comerciantes y contratistas pagaron deuda con Caja de Ahorros

Dos años le habría tomado a Henri Mizrachi Kohen saldar deudas que contrajo con la Caja de Ahorros (CA) para aportar a la cuenta de la sociedad New Business, de la cual salieron los fondos para la compra de la empresa periodística que publica Panamá América, Crítica y Día a Día.

Entre octubre de 2012 y agosto de 2014, el socio del expresidente Ricardo Martinelli –y actual directivo de la Autoridad del Canal de Panamá– hizo 16 transacciones para pagar los $7 millones que el banco estatal le había prestado en diciembre de 2010 y que, según dijo, se utilizaría para proyectos inmobiliarios.

Poco a poco

Un día abonaba $300 mil; al mes siguiente aportaba $482 mil; luego, $675 mil, y así. El patrón siguió hasta que el 1 de agosto de 2014, cuando se estrenaba el gobierno de Juan Carlos Varela, Mizrachi terminó de cancelar las deudas.

La táctica para reunir los $7 millones fue la misma usada para recolectar los fondos con que la sociedad New Business sufragó la compra del grupo editorial: personas naturales y jurídicas aportaron determinadas cantidades de dinero.

¿Quiénes son? La lista es heterogénea: desde comerciantes de la colonia hebrea en Panamá, contratistas del Estado, hasta un carismático empresario español que, según la prensa de su país, hizo fortuna en Panamá.

Transacción sospechosa

El dinero salió de ocho sociedades (ver infografía), dos de ellas, viejas conocidas del Estado: Corporación Logística del Caribe, S.A., que hizo transacciones a la extinta casa de valores Financial Pacific (FP), y ligada a Ramón Carretero, investigado en el caso FP-Jal Offshore. Esta empresa le dio $350 mil al directivo del Canal.

La otra es Condotte Panamá y Asociados, S.A., una de las empresas que integró el Consorcio Ciudad Deportiva 2012, a quien se le encargó el fallido proyecto de la Ciudad Deportiva de Colón, el 19 de junio de 2012, a un costo de $64.9 millones.

Los mismos

Entre los contribuyentes al pago del préstamo también figura Global Office –de Mizrachi– con $2.5 millones.

Documentos recopilados producto de las diligencias que hizo la Fiscalía Primera Especializada contra la Delincuencia Organizada para detectar quiénes ayudaron a pagar la deuda destacan que días antes de hacer la transacción, Global Office “recibió la misma suma de dinero [$2.5 millones], proveniente de la cuenta 000800018450 de la Caja de Ahorros, a nombre del Grupo Wisa”.

 

También se advierte que New Business fue otra que aportó $975 mil, pero la fiscalía revela que días antes esta sociedad recibió la misma cantidad de dinero procedente de una cuenta del Banco Aliado, cuyos firmantes eran Ricardo Martinelli Berrocal y Riccardo Francolini.

Para entonces, Francolini era el presidente de la Caja de Ahorros, entidad que concedió el préstamo a Mizrachi.

En la lista también está Silvertree Consulting, cuyo beneficiario es Jesús Barderas, personaje bastante conocido por la prensa española, a quien describen como “un personaje VIP” del antiguo bufete de abogados Mossack Fonseca.

Jesús Barderas no es un personaje desconocido en Panamá ni tampoco en República Dominicana, donde vivía hasta 2017, y mucho menos en su natal España.

El préstamo

Para obtener el crédito, Mizrachi Kohen declaró al banco “de la familia panameña” que el dinero sería usado como capital de trabajo en inversiones inmobiliarias. Pero el dinero no fue a dar a proyecto inmobiliario alguno, sino a la cuenta de New Business, usada para adquirir Epasa.

Dinero abonado a Condotte se usó para otros fines

La Ciudad Deportiva de Colón, que sería construida por el consorcio Ciudad Deportiva 2012, integrado, entre otras, por la empresa Condotte, nunca se concretó.

Condotte Panamá y Asociados, S.A, según investigaciones que adelanta la Fiscalía Primera  contra la Delincuencia Organizada, dio tres cheques a  la sociedad Global Office, de Henri Mizrachi, que suman $600 mil: uno por $482 mil, otro por $55 mil 199 y el tercero por $61 mil 881.

Esos dineros están bajo  el escrutinio de las autoridades. La Fiscalía Anticorrupción de Descarga adelanta una investigación por la posible comisión de delitos contra la administración pública en la Ciudad Deportiva de Colón, donde, según documentos recabados por el Ministerio Público, se desembolsaron $21.5 millones, por una obra que solo alcanzó el 16.8% de avance.

Una auditoría de  la Contraloría al  proyecto dio mayor claridad sobre el uso del dinero: $12.5 millones  del anticipo que el Instituto Panameño de Deportes dio a Condotte  se usaron “en actividades distintas al objeto del contrato, produciéndose de esta manera un perjuicio económico al Estado...”.

El círculo no se cierra allí. Un informe elaborado por Eliseo Ábrego, funcionario de la División de Delitos de Blanqueo de Capitales de la Dirección de Investigación Judicial, afirma que Condotte “utilizó dineros del Estado para contribuir a cancelar  préstamos solicitados por el señor Henri Mizrachi en diciembre de 2010 para intervenir en la compra de acciones de Epasa”.

En este caso, el informe  es una de las piezas con las que el Ministerio Público sustenta la posible comisión del delito de blanqueo de capitales.

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